Todos nuestros cuadros son reproducciones digitales de auténticas obras de arte. Las imprimimos sobre los mejores lienzos de algodón 100% del mercado y utilizando la última tecnología de impresión para un acabado impecable. Comprueba las calidades y acabados de nuestros cuadros y te darás cuenta de la auténtica diferencia respecto a nuestros competidores.
Sólo utilizamos telas 100% algodón, de los mejores fabricantes, con una densidad de 360gr/m2, para garantizar una imagen lo más real posible a la obra original. Son los mismos lienzos utilizados por los pintores y museos para las reproducciones de sus obras.
La textura del lienzo resalta la obra de arte y se consigue lo más cercano al aspecto de una pintura original.
Imprimimos las obras de arte utilizando la técnica de impresión por Giclée, la mas más avanzada actualmente, lo que permite una resolución, nitidez y colorido insuperables. Utilizamos impresoras gran formato con la más moderna tecnología y tintas ecológicas.
Montamos todos nuestros cuadros sobre un bastidor de madera de abeto alistonado de 3 x 3 cm / 3 x 4.5 cm. Esta madera es ideal para la fabricación de bastidores ya que al ser alistonada refuerza el bastidor y evita deformaciones del mismo debido a la tensión del lienzo.
Todos nuestros bastidores son fabricados artesanalmente a mano, uno a uno, a la medida deseada por el cliente. Van reforzados por tensores en las esquinas cortadas en inglete y, junto a su grapado en V y sus barras tensoras para medidas de más de 1 metro, garantizan un bastidor de madera duradero.
Iris en el jardín de Monet
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Iris en el jardín de Monet
Impresionismo
Oscar-Claude Monet (14 de noviembre de 1840 en París - 5 de diciembre de 1926 en Giverny) fue uno de los fundadores de la pintura impresionista. El término Impresionismo deriva del título de su obra Impresión, sol naciente creada en 1872. Sus primeras obras, hasta la mitad de la década de 1860, son de estilo realista. Monet logró exponer algunas de estas obras en el Salón de París. A partir del final de la década de 1860 comenzó a pintar obras impresionistas. Esta desviación del gusto de la época, que era marcado por las academias de arte, empeoró su situación económica a la vez que afianzó su decisión de continuar en ese azaroso camino. En la década de 1870 formó parte de las exposiciones impresionistas en las cuales también participaron Pierre-Auguste Renoir y Edgar Degas. Su obra Impresión, sol naciente formó parte del Salon des Refusés de 1874. Su carrera fue impulsada por el marchante Paul Durand-Ruel, pero a pesar de esto su situación financiera permaneció siendo difícil hasta mediados de la década de 1890. En esta época, Monet desarrolló el concepto de las «series» en las que un motivo es pintado repetidas veces con distinta iluminación. Al mismo tiempo comenzó a trabajar en el famoso jardín de su casa en Giverny con estanques de nenúfares que luego utilizó como motivo para sus pinturas.
Aunque el término Impresionismo se aplica en diferentes artes como la música y la literatura, su vertiente más conocida, y aquella que fue la precursora, es la pintura. El movimiento plástico impresionista se desarrolló a partir de la segunda mitad del siglo XIX en Europa —principalmente en Francia— caracterizado, a grandes rasgos, por el intento de plasmar la luz (la «impresión» visual) y el instante, sin reparar en la identidad de aquello que la proyectaba. Es decir, si sus antecesores pintaban formas con identidad, los impresionistas pintaban el momento de luz, más allá de las formas que subyacen bajo este. El movimiento fue bautizado por la crítica como impresionismo con ironía y escepticismo respecto al cuadro de Monet. Impresión: sol naciente. Siendo diametralmente opuesto a la pintura metafísica, su importancia es clave en el desarrollo del arte posterior, especialmente del postimpresionismo y las vanguardias.