Todos nuestros cuadros son reproducciones digitales de auténticas obras de arte. Las imprimimos sobre los mejores lienzos de algodón 100% del mercado y utilizando la última tecnología de impresión para un acabado impecable. Comprueba las calidades y acabados de nuestros cuadros y te darás cuenta de la auténtica diferencia respecto a nuestros competidores.
Sólo utilizamos telas 100% algodón, de los mejores fabricantes, con una densidad de 360gr/m2, para garantizar una imagen lo más real posible a la obra original. Son los mismos lienzos utilizados por los pintores y museos para las reproducciones de sus obras.
La textura del lienzo resalta la obra de arte y se consigue lo más cercano al aspecto de una pintura original.
Imprimimos las obras de arte utilizando la técnica de impresión por Giclée, la mas más avanzada actualmente, lo que permite una resolución, nitidez y colorido insuperables. Utilizamos impresoras gran formato con la más moderna tecnología y tintas ecológicas.
Montamos todos nuestros cuadros sobre un bastidor de madera de abeto alistonado de 3 x 3 cm / 3 x 4.5 cm. Esta madera es ideal para la fabricación de bastidores ya que al ser alistonada refuerza el bastidor y evita deformaciones del mismo debido a la tensión del lienzo.
Todos nuestros bastidores son fabricados artesanalmente a mano, uno a uno, a la medida deseada por el cliente. Van reforzados por tensores en las esquinas cortadas en inglete y, junto a su grapado en V y sus barras tensoras para medidas de más de 1 metro, garantizan un bastidor de madera duradero.
Mujer en una ventana
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Mujer en una ventana
Romanticismo
Caspar David Friedrich (Greifswald, 5 de septiembre de 1774 – Dresde, 7 de mayo de 1840) fue un pintor paisajista del romanticismo alemán del Siglo XIX, generalmente considerado el artista alemán más importante de su generación.1 Es conocido por sus paisajes alegóricos de su periodo medio que muestra figuras contemplativas opuestas a cielos nocturnos, nieblas matinales, árboles estériles o ruinas góticas. Su interés primario como artista era la reflexión de la naturaleza y su trabajo, a menudo simbólico y anti clásico intenta dar una respuesta subjetiva y emocional al mundo natural. Las pinturas de Friedrich establecen la presencia humana en una perspectiva disminuida en contraste a extensos paisajes, reduciendo las proporciones a una escala que, según el historiador de arte Christopher John Murray «dirige la mirada del espectador hacia su dimensión metafísica». Friedrich maduró en una época en la que crecía la desilusión en toda la clase media europea dando lugar a una nueva apreciación de la espiritualidad. Este cambio en los ideales se expresa a menudo a través de una revaluación de la naturaleza, en artistas como Friedrich, Joseph Mallord William Turner y John Constable que trataron de representar la naturaleza como una «creación divina, que debe ajustarse contra el artificio de la civilización humana». Los trabajos que Friedrich realizó le trajeron renombre muy temprano en su carrera, y contemporáneos suyos como el escultor francés David d'Angers lo describían como el hombre que había descubierto «la tragedia del paisaje». Sin embargo, su obra cayó en desgracia durante sus últimos años y él murió en la oscuridad; en palabras del historiador del arte Philip Miller «medio loco». Mientras Alemania migraba hacia la modernización a finales del Siglo XIX, un nuevo sentido de urgencia caracterizó el arte, y las descripciones contemplativas y de quietud de Friedrich llegaron a ser vistas como el producto de una época pasada. El Siglo XX trajo consigo una renovada apreciación de su obra, a partir de 1906 con una exposición de treinta y dos de sus pinturas en Berlín. Para la década de 1920 sus pinturas habían sido descubiertas por los expresionistas. En la década de 1930 y principios de 1940los surrealistas y existencialistas tomaron con frecuencia ideas prestadas de su trabajo. El ascenso del nazismo en 1930 trajo consigo el resurgimiento de la popularidad de Friedrich, pero éste decayó junto con el régimen debido a la errónea asociación de su nacionalismo con esta ideología. No fue sino a finales de 1970 cuando Friedrich recuperó su reputación como icono del romanticismo alemán y pintor de renombre mundial.
La pintura romántica sucede a la pintura neoclásica de finales del XVIII, con unos nuevos gustos desarrollados por todas las facetas artísticas del Romanticismo como la literatura, la filosofía y la arquitectura. Está hermanada con los movimientos sociales y políticos, que ganaron cuerpo con la Revolución francesa. El término romántico, surgido en Inglaterra en el siglo XVII para referirse a la novela, fue adaptado a principios del siglo XIX a las artes plásticas, en contraposición al neoclasicismo imperante. El romanticismo en la pintura se extiende desde 1770 hasta 1870, prácticamente cien años, distinguiéndose tres periodos: 1770-1820 o prerromanticismo- El apogeo del romanticismo pictórico se da, aproximadamente, entre 1820 (hay fuentes que señalan 1815) y 1850 (o, por adoptar una fecha simbólica, 1848).- 1850-1870 o tradición post-romántica. Cada uno de estos períodos posee sus particularidades en cuanto lugares en que se desarrolló o artistas que lo adoptaron.